martes, 10 de agosto de 2021

JOSÉ MARINS: ¿LA PARROQUIA ES COMUNIDAD DE COMUNIDADES?

 

JOSÉ MARINS: ¿LA PARROQUIA ES COMUNIDAD DE COMUNIDADES?


José Marins, sacerdote.
5 de junio 2020

El sacerdote José Marins es un teólogo brasileño, fundador de las comunidades eclesiales de base a las que asesora desde hace 50 años en todo el continente. Busca recuperar la forma de vivir el Evangelio de las primeras comunidades cristianas. En una entrevista afirma que “el Concilio trató de recuperar esa forma de ser Iglesia, pero el clero se convirtió en uno de los mayores obstáculos para construir esas comunidades. Sobre todo en el mundo urbano cada parroquia es una isla y vive en torno de sí misma; no hay puentes hacia afuera”.

Criticando el clericalismo en sintonía con el papa Francisco, sigue diciendo: “El Pueblo de Dios debe sentirse hoy responsable de la evangelización, volviendo a la práctica de la primera Iglesia. Con la comunidad de base se recupera el primer nivel de la Iglesia: el de la caridad fraterna, del primer anuncio, del testimonio de vida. Durante mucho tiempo fueron pequeños grupos  que se distinguían y llamaban la atención porque vivían como hermanos, sin ser hermanos de sangre. Fue con la llegada de los emperadores cristianos que se cedieron los edificios públicos y basílicas para la celebración del culto cristiano con gran esplendor y se terminaron los pequeños grupos que se reunían en las casas. El sueño cultivado por el Concilio después de la Cristiandad, de una parroquia comunidad de pequeñas comunidades, no se realizó. A las pequeñas comunidades de base no se les dio autonomía ni apoyo o se las ubicó como un movimiento más. Los primeros veinte años después del Concilio las CEBs tuvieron una gran demanda, pero esto terminó con el pontificado de Juan Pablo II;  volvieron con Aparecida pero no con el interés de antes, ya sea por parte de los curas como de los obispos. En la actualidad el Sínodo de Amazonia ha sido tan valioso para nosotros como el Vaticano II porque abrió muchas puertas y posibilidades. Según el mismo Papa, todo lo que se ha propuesto en el Sínodo no se cancela, y se deja un campo abierto para que las diócesis pidan lo que crean que es importante y fortalece a la Iglesia local”.


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